Conciertazo de Mailers en Sala Euterpe
Mailers lo ha vuelto a hacer. Esta vez el escenario era una vuelta a los orígenes, a las salas de conciertos que invitan al intimismo, a la proximidad, que dan buen rollo. Y no defraudaron.
Desde el inicio del concierto, con la sala llena hasta cumplir con su aforo, el público coreaba las canciones de la banda. Los temas se iban entremezclando: canciones de su nuevo album, MarTe, con grandes éxitos de su dilatada trayectoria musical. Tras dos canciones, la gente cantaba a pleno pulmón hasta el punto que Anabel callaba y el tema se seguía escuchando sin perder un ápice de su esencia.
Tanto la banda alicantina como el público asistente tenían sed de música de sala de conciertos, de cercanía, de disfrutar sin pensar en la técnica del sonido, las luces o el espacio. Solo la música, solo su grupo sobre el escenario. Una perfecta comunión entre ambas caras de la misma moneda. No se podía pedir más.
La noche estuvo llena de guiños, de momentos de complicidad, de sonrisas. Y cuando llegó el momento de los bises, la sala se convirtió en un clamor, pidiendo otra y otra y otra más.
Y con un ambiente tan bonito, con una situación tan perfecta, la banda rompió con todo lo que quedaba en la recámara, haciendo incluso caso a la petición de "Venecia", no planificada previamente para esos momentos finales. Pero este grupo tiene tablas, muchas, así que intercambiaron miradas, unas pocas frases y un poco de afinación y... ahí estaba Venecia. El clímax de una actuación para el recuerdo.
Os dejamos con unas fotos que, aunque no reflejan lo que fue este concierto tan especial, os pueden animar a no perderos el siguiente:
